28/4/09


Muchos escritos pero escasos de inspiración.
No se me ocurre mejor canción que dejaros, así que si tenéis algo de tiempo escuchadla y a poder ser, pensadla (el portugués es más fácil de entender si lo leéis).
Gracias Papa, por llevarme a ver la película "Hector" y descubrirme esta canción (si quieres dejar algún comentario ya te apañaras, bien sabemos que eres un manitas. Eso sí, no te cargues el ordenador en el intento, que nos conocemos).

http://www.goear.com/listen/6c7b20c/miedo-pedro-guerra

25/4/09


Ahí lo dejo, de momento...
¿Recuerdas...?


Harta de noches salvajes, besos de tornillo y polvos de una noche decidí lanzarme al vació y caer cuanto más bajo mejor, llegar al límite, tocar fondo, someterme a la completa humillación, a la indignidad, a entregar mis principios, pensamientos y entrañas a quien los deseara, despreciarme hasta no ser nada, no ser nadie, dejar de ser para empezar a ser.
Todo carecía ya de importancia, no existían planes ni objetivos, no existían pasados, presentes ni futuros, sólo el aquí, sólo el ahora, tal como aprendí de mi segunda musa, mi demonio poeta, parte de mi inspiración, del quiero y no puedo, mi reflejo en el espejo.
No pretendo causar excitación alguna a fetichistas de la dominación, aunque si la produciera nada pasaría, igual era a quien me sometía, quien me mandaría, quien sería mi yo, mi vida, mi responsabilidad, ser una gota de lluvia más, entregarme, entregarme para mi libertad.

21/4/09


Me ausento unos días por motivos personales.
Nada importante, sólo inquietante.

Besos.

18/4/09


Me tomé un respiro antes de salir y decidí publicar este texto.
Disfrutadlo si podéis, y sino os j... jugáis una colchoneta hinchable en una timba de póquer con vuestra sombra que os sigue y os acompaña en la niebla del bosque de la vida donde viven los enanitos y duendes verdes en la cueva del olvido en la cual se encuentra el manuscrito de los tejados, las paredes y los suelos de los pilares de las bases que sostienen el infinito.

Que, ¿os he distraído un rato?


A vegades penso que la gent em pren com una espècie de consellera, més com una via d'escapament que no com a una persona a qui explicar dubtes de caire existencial, i això que crec que això últim se'm dóna bastant millor, però no, no ho solen preferir així.
No em considero una persona que sàpiga escoltar especialment bé, ni tampoc amb facilitat per donar consells sobre la vida, així que mai m'ho he acabat d'explicar amb claredat. Deu ser la peculiaritat del meu rostre? O bé una excusa barata per anar-se'n al llit amb mi?
Quan els meus, diguem-lis, pacients - generalment homes - em truquen, sempre els acostumo a invitar a casa. Després de mitja hora de xerrada se'm llencen a sobre sense escrúpol algun, i jo per no fer el lleig i portar la teràpia a terme amb èxit no els rebutjo en cap moment. Segur que forma part del procés, oi?
Mai he demanat res a canvi, només intento ajudar els meus amics, però quan se'n van, després d'una intensa sessió terapèutica, sempre em trobo amb un feix de bitllets a la tauleta de nit.
Encara em fa prou vergonya preguntar-lis perquè vull jo els diners, si només els intentava animar amb la meva generosa amistat, però ben pensat de pas aprofito per pagar les lletres del pis i, perquè no, permetre'm algun que altre capritx.


A veces pienso que la gente me toma como una especie de consejera, más como una vía de escape que no como una persona a quien explicar dudas de tipo existencial, y eso que creo que esto último se me da bastante mejor, pero no, no lo suelen preferir así.
No me considero una persona que sepa escuchar especialmente bien, ni tampoco con facilidad para dar consejos sobre la vida, así que nunca me lo he acabado de explicar con claridad. ¿Debe ser la peculiaridad de mi rostro? ¿O bien una excusa barata para irse a la cama conmigo?
Cuando mis, llamémosle, pacientes - generalmente hombres - me llaman, siempre acostumbro a invitarles a casa. Después de media hora de charla se me echan encima sin escrúpulo alguno, y yo para no hacer el feo y llevar la terapia a cabo con éxito no les rechazo en ningún momento. Seguro que forma parte del proceso, ¿no?
Nunca he pedido nada a cambio, sólo intento ayudar a mis amigos, pero cuando se van, después de una intensa sesión terapéutica, siempre me encuentro con un fajo de billetes en la mesita de noche.
Aún me da bastante vergüenza preguntarles para qué quiero yo el dinero si sólo les intentaba animar con mi generosa amistad, pero bien pensado de paso aprovecho para pagar las letras del piso y, porqué no, permitirme algún que otro capricho.

15/4/09


Algunos ya lo conocéis...


La música retumba en mi cabeza.
Desconecto. Pienso. Escribo, escribo desde mi mundo. Sólo mío. Escribo para desahogarme. Escribo por ambición, información, poder y corrupción. Escribo sólo para mí, para alimentarme, ahogarme, ahogarme en vanidad, en sueños rotos, esperanzas casi perdidas, en caminos sin recorrer deseando ser recorridos. Escribo para nadie. Escribo para excusarme, un intento frustrado de amarte, quererte, comprenderte, respetarte.
Pero sólo me oigo a mí, mi música, mi lápiz dibujar letras en un papel, mis pensamientos agujerear mi cabeza. Sólo me oigo a mí, esperando que me perdones, que me descartes, rechaces, maltrates, sin creer en el merecer, sabiendo que es lo que merezco. Sabiendo todo y nada. Sabiendo que sólo soy una huella en la playa, un aleteo que se desvanece en el aire, una nota nunca cantada, un deshecho entre deshechos, mi salvación, mi condena, mi esclava, mi vida, mi muerte...


Todo empieza, todo acaba...

13/4/09


A veces apetece algo más convencional. A la vez pretendo derrochar emociones con éste diálogo, igual que lo pretendo con gran parte de mis textos.
De pretender a conseguir siempre hay un trecho, pero como muchos ya sabéis mi ambición no brilla precisamente por su ausencia.


- Nena, controla't, que t'estàs passant amb tanta birra.
- Me la pela. Se que no és un dia especial i que no tinc excusa, però qui sap com acabarà. Al menys col·labora a que pugui ser-ho, no?
- Saps que som persones molt diferents. A tu t'agrada beure fins a no saber que cony fas, i a mi m'agrada recordar la nit sencera.
- Que poc em coneixes. M'encanta beure, sí, però també recordar la nit. Ja se que són conceptes prou incompatibles, però posats a triar... Em faràs un petó d'una puta vegada o què?
- Et faig això i el que tu vulguis, preciosa.
El petó va acabar portant-los al seu llit, on van follar intensament.
S'estimaven, però aquest només era un dels molts intents per intentar evadir-se de la realitat.
- Passa'm una cigarreta, fes-me el favor.
- Creus que el sexe està salvant la nostra relació?
- I que més dóna això? Ens ho passem bé, no? Perquè tanta tendència a qüestionar-se el que el sexe aconsegueix o no aconsegueix?
- I tu perquè tens tanta tendència a preguntar-te el perquè de tot?
- Doncs... Me l'acabes de fotre doblegada.
- Tu m'estimes, oi?
- Es clar que sí, però no se com.
- Com que no saps com?
- No se si estem fets l'un per l'altre, de fet ja ni m'interessa saber-ho. Ens ho passem de conya cardant, gaudim. Si s'acaba bé, i sinó també.
- Collons, quant entusiasme a salvar-nos.
- Potser més que salvar-nos seria just el contrari. Qui sap. Amb els anys he decidit que prefereixo gaudir de cada moment sense saber res en cert. Tampoc ho sabia abans, ni tan sols se si volia saber-ho.
- Tens més condons a ma?
- Sí, ho fem un altre cop o què?
- Preciosa, m'has convençut. Fem d'aquest moment un orgasme inoblidable.
- Crec que ens comencem a entendre, amor meu...


- Nena, contrólate, que te estás pasando con tanta birra.
- Me la pela. Se que no es un día especial y que no tengo excusa, pero quien sabe como acabará. Al menos colabora a que pueda serlo, ¿no?
- Sabes que somos personas muy diferentes. A ti te gusta beber hasta no saber que coño haces, y a mí me gusta recordar la noche entera.
- Qué poco me conoces. Me encanta beber, sí, pero también recordar la noche. Ya que son conceptos bastante incompatibles, pero puestos a elegir... ¿Me darás un beso de una puta vez o qué?
- Te doy eso y lo que tú quieras, preciosa.
El beso terminó llevándolos a su cama, donde follaron intensamente.
Se querían, pero éste sólo era uno de los muchos intentos para intentar evadirse de la realidad.
- Pásame un cigarrillo, hazme el favor.
- ¿Crees que el sexo está salvando nuestra relación?
- ¿Y que más da eso? Nos lo pasamos bien, ¿no? ¿Porqué tanta tendencia a cuestionarse lo que el sexo consigue o no consigue?
- ¿Y tú porqué tienes tanta tendencia a preguntarte el porque de todo?
- Pues... Me la acabas de meter doblada.
- Tú me quieres, ¿verdad?
- Claro que sí, pero no se como.
- ¿Cómo que no sabes como?
- No se si estamos hechos el uno para el otro, de hecho ya ni me interesa saberlo. Nos lo pasamos de coña follando, disfrutamos. Si acaba bien, y sino también.
- Joder, cuánto entusiasmo a salvarnos.
- Quizás más que salvarnos sería justo lo contrario. Quién sabe. Con los años he decidido que prefiero disfrutar de cada momento sin saber nada en cierto. Tampoco lo sabía antes, ni tan sólo se si quería saberlo.
- ¿Tienes más condones a mano?
- Sí, ¿lo hacemos otra vez o qué?
- Preciosa, me has convencido. Hagamos de este momento un orgasmo inolvidable.
- Creo que nos empezamos a entender, amor mío...

11/4/09


Acepto críticas (gracias Pepe).


Quants cops es van creuar les seves mirades?
Ella no ho sabia prou bé, tampoc va gosar preguntar-li. Al cap i a la fi només eren això, mirades que no arribarien a ser res més.
La pluja queia dins un sense sentit, dins d'un indret del que preferia escapar, però sempre sense èxit.
No era la única que mirava la pluja, però potser sí la única que l'observava.
Aquell lloc respirava buidor. Això li encantava, el feia més seu, més personal, però era inevitable que totes aquestes sensacions no la submergissin més, encara, en les seves pors i obsessions.
Li digueren un dia: “qui és obsessiu, és obsessiu”. Mai s'ho havia plantejat de tal forma, però potser era veritat, la seva veritat, i l'únic que la podia salvar era una obsessió major que la beneficies.
No demanava tant - o això pensava - només alguns somriures més als seus moments de solitud, somriures que tan poc freqüents s'havien tornat a mesura que passaven els anys.
I va romandre pensativa, per no variar, sentada en aquella espècie de cadira-banc, i repetint-se a ella mateixa: “si les mirades no arriben a ser més, serà perquè no vols...”


¿Cuántas veces se cruzaron sus miradas?
Ella no lo sabía muy bien, tampoco se atrevió a preguntarlo. Al fin y al cabo sólo eran eso, miradas que no llegarían a ser nada más.
La lluvia caía en un sin sentido, dentro de un lugar del que prefería escapar, pero siempre sin éxito.
No era la única que miraba la lluvia, pero quizás sí la única que la observaba.
Aquel lugar respiraba vacío. Eso le encantaba, lo hacía más suyo, más personal, pero era inevitable que todas estas sensaciones no la sumergieran más, aún, en sus miedos y obsesiones.
Le dijeron un día: "quién es obsesivo, es obsesivo". Nunca se lo había planteado de tal forma, pero quizás era verdad, su verdad, y lo único que la podía salvar era una obsesión mayor que la beneficiara.
No pedía tanto - o eso pensaba -, sólo algunas sonrisas más en sus momentos de soledad, sonrisas que tan poco frecuentes se habían vuelto a medida que pasaban los años.
Y permaneció pensativa, para no variar, sentada en esa especie de silla-banco, y repitiéndose a sí misma: "si las miradas no llegan a ser más, será porque no quieres..."

8/4/09


Mi querida Lina, mi amada Lina, deberías saber que te pienso noche y día. No por ser tan lista, inteligente, atrevida y decidida, sino por tus pechos siempre erguidos, tus pezones, tu clítoris y tu vagina.
Y es que solamente en esa noche puedo soñar ya, esa noche en que me quitaste la virginidad, la inocencia, el miedo a ser amada, aunque sólo fuera en la cama.
Te deseo, mi Lina, te deseo en otoño, verano, invierno y primavera, te deseo aunque no quiera, te deseo aunque no deba.
Se que para ti soy una más, una menos, nada esencial. En tu mundo sumergido, oscuro y frío, lleno de rabos, coños y fluidos... ¿Cómo me vas a pensar?
Sólo soy una más, sólo soy una más...
Tres años pasaron ya desde que pude probarte, tres largos años sin poder amarte, tres largos años atormentándome.

Te quiero, te odio, mi Lina, mi sueño, mi vida...

5/4/09


També soc de les que creuen incertament que la casualitat i la sort no existeixen, però són també tants els cops en que sembla acudir, i m'atreviria a dir, quedar-se a les nostres vides per determinar-les, per formar part de tot el que la compon.
I és després quan toco altre cop de peus a terra i penso que això només ha estat per totes les decisions que he i han pres, conscient i inconscientment.
I és després quan m'adono que en realitat estic escrivint de tot i de res, o només repetint-me constantment i escrivint sobre una sola cosa, com sempre, com mai, en un bar normalment poc atractiu, sola i a la vegada acompanyada, rodejada, però perduda en un intent probablement innecessari d'intentar trobar-me a mi mateixa.

También soy de las que creen inciertamente que la casualidad y la suerte no existen, pero son también tantas las veces en que parece acudir, y me atrevería a decir, quedarse en nuestras vidas para determinarlas, para formar parte de todo lo que la compone.
Y es después cuando toco otra vez de pies en el suelo y pienso que esto sólo ha sido por todas las decisiones que he y han tomado, consciente e inconscientemente.
Y es después cuando me doy cuenta que en realidad estoy escribiendo de todo y de nada, o simplemente repitiendome constantemente y escribiendo sobre una sola cosa, como siempre, como nunca, en un bar normalmente poco atractivo, sola y a la vez acompañada, rodeada, pero perdida en un intento probablemente innecesario de intentar encontrarme a mí misma.

3/4/09


Aquesta serà una altra de les enèsimes vegades que escrigui sobre relacions interpersonals. La majoria de cops resulta ser quasi per una forta necessitat interna, però el que moltes vegades també implica és un fort compromís, un compromís que he establert durant els anys amb mi mateixa, i crec que pràcticament sense voler.
Com sempre els camins són incerts, plens d'obstacles i de casualitats que normalment no esperem, i tot i que aquests es separin poques, algunes o moltes vegades, no és el fet de que es retrobin el que realment és important? No és sinó aquest fet el que determina que les persones vulguin compartir sensacions, emocions, experiències, i perquè no, els camins mateixos?
Nombroses vegades els dubtes es poden apoderar de nosaltres, i fins i tot fer-nos prendre de nou diferents rutes, però em nego a creure que els retrobaments siguin cosa de quelcom tan banal - pel meu gust - com el destí o la sort.
Desitjo de tot cor poder seguir fent servir amb tota seguretat la frase “parlant la gent s'entén”, i més si aquesta pot fer que hi hagi un retrobament final, o en última instància, si en pot portar un altre que converteixi un dia més en un dia esperançador.


Esta será otra de las enésimas veces que escriba sobre relaciones interpersonales. La mayoría de ocasiones resulta ser casi por una fuerte necesidad interna, pero lo que muchas veces también implica es un fuerte compromiso, un compromiso que he establecido durante los años conmigo misma, y creo que casi sin querer.
Como siempre los caminos son inciertos, llenos de obstáculos y de casualidades que normalmente no esperamos, y aunque éstos se separen pocas, algunas o muchas veces, ¿no es el hecho de que se reencuentren lo que realmente es importante? ¿No es sino este hecho lo que determina que las personas quieran compartir sensaciones, emociones, experiencias, y porque no, los caminos mismos?
Numerosas veces las dudas se pueden apoderar de nosotros, e incluso hacernos tomar de nuevo diferentes rutas, pero me niego a creer que los reencuentros sean cosa de algo tan banal - para mi gusto - como el destino o la suerte.
Deseo de todo corazón poder seguir utilizando con toda seguridad la frase "hablando se entiende la gente", y más si esta puede hacer que haya un reencuentro final, o en última instancia, si puede traer otro que convierta un día más en un día esperanzador.

1/4/09


Otra millonésima forma de explotar un buen verbo...

Te quiero sin querer quererlo, pero quizás querer quererte no seria quererte, no seria querido. Querer quiero mucho queriendo, pero querer sin quererlo, ¿no es algo mejor que querer? ¿Quien no prefiere el querer que el deber? Y aunque a veces no quiera a quien me quiere, ni quiera querer ser querida o no quiera saber querer, sigo y seguiré queriendo, pero siempre a mi manera.
¿Qué más quieres?